LA PRECISIÓN DEL LENGUAJE
Existen en el lenguaje hablado y escrito una serie de
prácticas utilizadas por conveniencia, pero que restan precisión a la forma en
cómo se comunican las personas. Entre
éstas, se pueden mencionar:
1. Uso excesivo de la voz
Han influido en este fenómeno las traducciones, sobre todo
las provenientes del inglés y del francés, idiomas éstos en los que la voz
pasiva se emplea mucho más que en el castellano.
El esquema de la oración activa es:
ü Sujeto, más voz
activa verbal, más objeto. Ejemplo: El labrador esparce la semilla
Por otro lado, el esquema de la voz pasiva es:
ü Objeto, más voz
pasiva verbal, más sujeto. Ejemplo: La semilla es esparcida por el labrador.
Siempre existe la alternativa de expresar las ideas en
otra forma, sin tener que recurrir necesariamente al uso de la voz pasiva.
Por ejemplo:
• Los cuerpos son movidos por la
gravitación
→ Los cuerpos obedecen a la gravitación
• Poco importa ser odiado por esos
hombres
→ Poco importa el odio de estos hombres
• Este cuadro ha sido pintado por usted
→ Este cuadro es obra de usted
2. Las palabras de plástico (Comodines)
Ejemplo de este tipo de palabras lo constituyen los
vocablos “COSA”,
“ALGO”, “ESTO” y “ESO” y sus combinaciones.
2.1.
“Cosa”
Esta palabra se emplea más cada día, porque se tiende a lo
fácil, ya que todo es “COSA” en este
mundo, cuando se toma en el sentido más amplio posible: armario, lápiz, etc.
Así no es extraño hablar con frecuencia de “la cosa romántica”, “la cosa
existencialista”, “la cosa poética”, “la cosa del ambiente”, etc. “COSA” es probablemente
la palabra de sentido más vago, más impreciso, el vocablo más vulgar y trivial
de la lengua.
Contra este fenómeno se puede optar por sustituir tan
insustancial palabra por otra más precisa.
Ejemplos:
• La humildad es una cosa muy rara
→ La humildad es una virtud muy rara
• Una sola cosa ocupa su mente
→ Una sola obsesión ocupa su mente
Ejercicios:
Sustituya en los siguientes ejercicios la palabra cosa otra más precisa.
a)
La envidia es una cosa despreciable
b) La falta de inteligencia es una cosa irremediable
c)
La gula es una cosa vergonzosa
d) Esta estatua es una cosa
notable
e)
La educación de los niños es una cosa difícil.
f)
El amianto es una cosa incombustible
g) La cosa se
someterá al concejo
h) Nunca contemplé una cosa
tan magnífica
i)
La burla es la única cosa que le queda a usted
j)
El microscopio es una cosa indispensable para el biólogo
k)
Exponga usted las cosas como han pasado
l)
Para un niño el juego es una cosa| necesaria
m)El viejo marino se vanagloriaba de cosas inverosímiles.
2.2.
“Algo”
Este vocablo del que tanto se abusa en la conversación
cotidiana, proporciona la medida de su correcto empleo en su propia definición:
algo es un pronombre indefinido y, por tanto, sólo debe usarse cuando se quiera dar a la frase
un sentido indeterminado; cuando se quiera mencionar algo (aquí
está bien empleado) sin precisar lo que ese algo sea.
Más, precisamente por su carácter indefinido, impreciso es
por lo que este “algo” se nos mete entre los puntos de la pluma, resbala entre
las teclas de la máquina o del ordenador, con una facilidad y profusión dignas
de mejor desempeño. Fácil resulta poner “algo”…, donde deberíamos escribir algo
(bien empleado) más definido.
Ejemplos:
• Leeré algo mientras vienes,
CORRECTO se puede elidir o no.
→Leeré mientras vienes,
• Esta historia tiene algo trágico,
INCORRECTO, requiere de una mayor precisión.
→ Esta historia tiene un sentido trágico, o bien
→ Esta historia tiene un argumento trágico
Ejercicios:
En las siguientes frases, unas veces conviene sustituir la
palabra “algo” por otra más precisa;
en cambio, otras son correctas y debe dejarlas así; por último, hay algunas en las que debe suprimir la
palabra “algo”, lo que sucede casi
siempre es que se emplea seguida de un adjetivo. En este último caso, basta con
suprimir el pronombre indefinido y sustituir o no el adjetivo por un
sustantivo, según convenga.
a)
Esta música tiene algo melancólico
b) Sus palabras tienen algo
de malicia
c)
Esto es algo prodigioso.
d) He visto en sus ojos algo
de odio
e)
Este libro es algo estupendo
f)
Todos los genios tienen algo de locos.
g) Esto es algo
infame.
h) En estas ruinas hay algo
de estilo románico
i)
En su cara había algo de ferocidad.
j)
Esta mujer es algo imponente.
k)
El hombre más fuerte tiene algo débil
l)
Aquí huele a algo raro
m)Esta señora tiene algo
distinguido
n) El nuevo modelo es algo
formidable
o) En este asunto hay algo
poco claro.
2.3.
“Esto” y “Eso”
Los pronombres demostrativos “ESTO” y “ESO”, por
influencia francesa, se introducen cada vez más en nuestra lengua. Pero la
frase puede quedar más elegante, más española, si se sustituyen dichos
pronombres por el relativo o por el adjetivo demostrativo seguido de un
sustantivo.
Ejemplo:
• Tú amas a tus padres. Esto te honra.
INCORRECTO, requiere de mayor precisión.
→ Tú amas a tus padres. Este sentimiento te honra, o bien
→ Tú amas a tus padres, lo cual te honra.
Ejercicios
En las frases siguientes sustituye los pronombres ESTO, ESO, por el relativo o por el
adjetivo demostrativo, según los casos. Si es preciso, debes dar otro giro a la
frase.
a)
Está entregado a la bebida. Eso lo
arruinará
b) Practica mucho el deporte. Esto te servirá para
fortalecerte
c)
Luis acaba de ganar otro gran premio.
Esto ya no asombra a nadie.
d) El abogado estudia un pleito muy difícil. Esto le retendrá
en el bufete toda la tarde.
e)
Tú te confías a cualquiera. Esto
puede acarrearte disgustos.
f)
Pedro se ha caído de la bicicleta.
Eso se lo había advertido yo.
g) Se expresa con afectación. Esto hace difícil su lectura.
h) Juan perdió todo su dinero en Montecarlo. Eso no le hundió
ni mucho menos.
i)
Es un hombre inteligente y
trabajador. Esto le hará triunfar.
j)
Se le olvidó preparar los últimos
temas. Esto fue causa de que lo suspendieran.
2.4. El
“Relativo”
El pronombre relativo (que, cual, quien, cuyo) es otra de
las dificultades con las que se pueden tropezar las personas que escriben.
Ejemplo:
• He visto a tu hermano que me dio
noticias de tu tía que está mala desde el día del accidente que tuvo cuando iba
a la fiesta que se celebró el viernes pasado.
Se le llama así porque relaciona algo en la frase:
sustituye a un antecedente y se une a él con una frase de la que, el propio
relativo forma parte.
QUE y CUAL se refieren a personas y cosas; QUIEN solo a
personas y puede ir sin antecedente.
Ejemplos:
• La casa que compraste
• El hombre que asaltó la casa
• Quien da pan a perro ajeno
El abuso del pronombre relativo puede dar un sentido
equívoco y provocar también incorrecciones y ser causa de pesadez en la
lectura.
Ejemplos:
• Le envío a usted una liebre con mi
hermano, que tiene las orejas cortadas
INCORRECTO
→ ¿Quién tiene las orejas cortadas? ¿La liebre o mi
hermano?
• He visto el coche del médico, que
está hecho un vejestorio.
INCORRECTO
→ ¡Pobre médico!
• Conozco mucho a Pablo el hijo de
María, que viene mucho a casa
INCORRECTO
→ ¿Quién viene? ¿Pablo o María?
Puede remediarse esta falta mediante el uso de otros
vocablos y otros órdenes sintácticos.
Ejemplos:
• El general que liberó la ciudad
→ El general liberador de la ciudad
• Dos movimientos que se producen al
mismo tiempo
→ Dos movimientos simultáneos
• Un padre que perdona fácilmente a su
hijo
→ Un padre indulgente con su hijo
• Las hojas secas que hay en el bosque
→ Las hojas secas del bosque
• Una prueba que confirma mis sospechas
→ Una prueba en apoyo a mis sospechas
3. Los verbos fáciles
3.1.
Tener, ser, estar, encontrarse, haber y tener
Estos verbos son “verbos fáciles”, de amplia significación
y a los que se recurre fácilmente cuando se redacta con prisa. Estos verbos
pueden ser reemplazados por un verbo intransitivo o pronominal que sea más
expresivo.
Ejemplos:
• En el tejado de la casa hay una
bandera
→ En el tejado de la casa ondea una bandera
• Sobre el césped se encuentran los
rayos de la luna
→ Sobre el césped resplandecen los rayos de la luna
3.2.
Hacer, poner, decir y ver
3.2.1.
Hacer
Este verbo, tan amplio y tan “incoloro” se ha introducido
de manera profusa en el habla popular y básicamente se debe a influencia del
francés. Hoy se HACE de todo. Así se dice convenientemente “hacer música”, por
“escribir o componer música”; “hacer un viaje”, por “viajar”; “hacer un
proyecto”, por “formar un proyecto”, etc.
En el diccionario de incorrecciones de A. Santamaría
aparece una larga lista se locuciones con el verbo “hacer”, entre las que se
pueden mencionar:
Hacer el honor → por honrar
Hacer maravillas → por obrar maravillas
Hacer una mala pasada → por jugar una mala pasada
Hacer blanco → por dar en el blanco
Hacer abstracción → por prescindir
Hacer milagros → por obrar milagros
Hacerse ilusiones → por forjarse ilusiones
La regla general – pero no absoluta – es utilizarlo cuando
se refiera a acciones manuales, de manipulación o de artesanía. De esta forma,
es correcto decir “hacer una mesa”, “hacer un bizcocho”, “hacer un café”, o
“hacer pompas de jabón”.
Sin embargo, existen matices que es conveniente tomar en
cuenta. Por ejemplo: un artesano puede hacer
figuras de barro para un Nacimiento;
pero un escultor no hace, sino que esculpe o moldea una estatua.
3.2.2.
Poner.
Este verbo se puede reemplazar por otros, siempre que
éstos den más precisión a la frase.
Ejemplos:
• Luis puso varias palabras
→ Luis escribió varias palabras
• Juan puso en orden sus libros
→ Juan ordenó sus libros
• Poner la sonda en una herida
→ Introducir la sonda en una herida
3.2.3.
Decir y ver
Éstos son otros dos verbos fáciles de los
que se abusa y que, con un poco de atención por parte del que escribe, pueden y
deben ser sustituidos por otros verbos más precisos.
Ejemplos:
• Decir un soneto
→ Recitar un soneto
• Vea por usted mismo
→ Juzgue por usted mismo
• Decir blasfemias
→ Proferir blasfemias
• Luis es incapaz de ver la belleza de
este cuadro surrealista
→ Luis es incapaz de apreciar la belleza de este cuadro
surrealista
Tomado de: Taller de ortografía y redacción básicas, capítulo IV. La riqueza del idioma, Martín Vivaldi
No hay comentarios:
Publicar un comentario